Ha llegado el momento de cambiar el domicilio de tu “hogar dulce hogar” y por supuesto, quieres encontrar la perfección hecha cuatro paredes; no pagarás por menos. Así que sales al mercado cargado de ilusiones solo para encontrarte con un mar de opciones, agencias, requisitos y trámites. Aquí, la única forma de no ser arrastrado por la corriente del mundo de la inmobiliaria es tener muy claro que estás buscando y aún más importante, lo que puedes pagar. Además, siempre es bueno tener en cuenta los diferentes factores que nos pueden llevar hacia un lado u otro del camino.